Época: Mesoamérica
Inicio: Año 2000 A. C.
Fin: Año 500 D.C.

Antecedente:
La transición hacia la vida del poblado

(C) Andrés Ciudad y María Josefa Iglesias



Comentario

Por lo demás, se mantiene la cultura aldeana en lo que se denomina tradición cultural Mamom de cerámicas monócromas en rojo o anaranjado y de figurillas femeninas, sólidas, decoradas con incisiones y tiras aplicadas de barro para definir los rasgos físicos y también algunas adiciones decorativas. Estos sitios campesinos se combinan con pequeños centros de integración tanto en el Petén como en Yucatán (Komchén, Dzibilchaltún).
Es esta una amplia región mal conocida arqueológicamente, y con una diversidad geográfica y cultural que dificulta la reconstrucción de los procesos culturales. En las costas de Nayarit se mantuvo durante los primeros momentos del Formativo un patrón de cultura característico de los recolectores de moluscos y productos marinos ya definido a finales del Arcaico. En la costa de Colima, sin embargo, se optó por un sistema similar al mencionado en la fase Barra de Chiapas, con cerámicas que incluyen tecomates, botellas de asa estribo y jarras de engobe rojo y rojo sobre crema, con fuerte conexión con las confeccionadas en la costa de Ecuador.

De gran relevancia son las tumbas de tiro vertical excavadas desde el Formativo Temprano en la roca volcánica -talpetate- por medio de escalones que desembocan en una o varias cámaras de forma ovoide y colocadas a alturas diferentes. Estos recintos, de 3 a 18 metros de profundidad, fueron utilizados en una dilatada secuencia, de manera que en ellas podemos encontrarnos entierros primarios y secundarios, reutilizaciones y, por tanto, ajuares funerarios de muy diferentes períodos.

De entre las ofrendas destacan figurillas muy expresivas y variadas, algunas de las cuales forman parte de la tradición iniciada en Tlatilco; pero otras terracotas son más realistas, con mayor detalle y decoradas con colores y diseños muy expresivos. En Colima se inició entonces un modo de hacer figurillas planas con aplicado, posturas animadas y a veces formando grupos. Son comunes también vasijas dobles con pitorro asociadas a animales, en particular perros en muy diversas actitudes: bailando, jugando, durmiendo..., los cuales se han considerado como guías para acompañar a los muertos en su camino por el inframundo.

Por el contrario, en Jalisco se elaboró un estilo de figurillas sólidas y huecas con representaciones de seres humanos con vestiduras sencillas, madres con hijos, guerreros armados, etc., que resultan muy informativos para reconstruir la vida en la región.